El activismo comunitario fue siempre un distintivo en la vida de Alfredo Castañeda Alcalá, quien fuera originario de Vicente de Guerrero, Durango y gran parte de su vida la dedicara a defender los derechos de los mexicanos en el extranjero.
Apenas el pasado 07 de julio familiares de Alfredo dieron a conocer a través de redes sociales el fallecimiento de este activista comunitario.
Su transitar por la defensa de los derechos de los migrantes llevó a Castañeda a enfrentar diversas situaciones que iban desde un trámite en la oficina consular de México en Dallas, manifestaciones frente a los Departamentos de Policía locales, así como a las propias autoridades federales para buscar la libertad de aquellos que habían sido detenidos por cargos de posesión y distribución de drogas en Dallas.
Su andar lo llevó a lidiar con el cobro por el derecho de internación de vehículos extranjeros a territorio mexicano y donde las autoridades mexicanas en aquel entonces veían esto como una suculenta vía de ingresos provenientes de los mexicanos en el exterior.
Así también, Alfredo fue parte de diversas organizaciones en favor de los migrantes mexicanos; conformó junto a otros luchadores sociales frentes comunes de lucha para tratar de contrarrestar los efectos de ordenanzas antiinmigrantes que buscaban criminalizar la figura del migrante indocumentado.
En el trayecto de su vida, Alfredo se rodeó de diversos activistas que buscaban un fin común: alzar la voz por aquellos que no eran escuchados ni visibilizados y defender sus derechos, inclusive hasta de su propio gobierno.
Patricia Juárez, activista comunitaria, originaria de Ciudad Juárez, en su momento, acompañó a Castañeda en diversas manifestaciones, marchas y movimientos en pro de los derechos de los migrantes.
“Cómo activistas comunitarios tuvimos tiempos de gloria; yo conocí a Castañeda en 1999 y en el 2000 ya habíamos formado la organización Mexicanos Unidos 2000 Asociación Nacional; él era muy movido”.
Pero, no solo el Norte de Texas era el escenario del activismo comunitario, “junto a Castañeda salimos a diversos lugares a manifestarnos, estuvimos en Austin, Houston y California para elevar la voz de los migrantes”.
Juárez reconoció que en su momento hubo situaciones muy difíciles como lo fue el caso de las drogas falsas y donde Juárez, Castañeda y otros más habrían retado al sistema judicial y a través de sus protestas lograron libera a más de 70 mexicanos detenidos de manera injusta.
El afán por poner en alto la figura de los mexicanos en el extranjero empujó a Alfredo a buscar espacios en la Cámara de Diputados en la Ciudad de México, así también en el Congreso del Estado de Durango donde encabezó reuniones con legisladores locales exponiendo las diversas necesidades de la comunidad duranguense en el exterior.
Roberto Alonzo, ex representante estatal de Texas, afirmó que Castañeda fue un elemento esencial en las luchas por los derechos de los migrantes.
“Cuando comenzamos con GAILA, un grupo de apoyo a migrantes; Alfredo fue muy activo y contribuyó mucho y parte de lo que pasó con la comunidad inmigrante fue gracias a su participación”.
No solo fue levantar la voz, afirmó Alonzo, “también en la lucha por el derecho al voto, también en México, así como la lucha por la obtención de la doble nacionalidad para los mexicanos nacidos en el extranjero”.
Señaló el exlegislador estatal que Alfredo dejó un legado muy importante en el activismo comunitario en el Norte de Texas.
Durango, su tierra también fue el escenario de participación política de Castañeda al exponer ante los legisladores locales del Congreso Estatal demandas sentidas de la comunidad.
Eladio Vargas, originario de Guerrero, ex concejero del Instituto de los Mexicanos en el Exterior y también activista comunitario fue partícipe de la lucha de Castañeda.
“A él le reconozco su integridad incorruptible y su lucha por lograr un mayor y mejor bienestar para nuestra comunidad; su participación fue muy importante y hoy que ya se encuentra descansado envío mi más sentido pésame a su familia”.
Alfredo estará siendo velado y sus honras se llevarán a cabo este sábado 13 de julio en la casa Funeraria Pilar de la Ciudad de Garland, Texas.
Por Luis Ángel Galván Peimberth
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